No Lusers 140: D.O.S. de recuerdos

Esta noche es el gran día. Un día que estoy seguro que no volveré a ver en mi vida. En mi infancia vi la  final de la Eurocopa de 1984 contra Francia y ese gol de mentira que Platiní le metió al mítico Arconada... y perdimos. Luego tuvimos que esperar 24 años hasta que llegó la Eurocopa del 2008 y el Mundial de 2010... y ahora, de manera consecutiva, la final de la Eurocopa de 2012. La razón, y la estadística, me dice que pasarán muchos años hasta que España vuelva a ver algo así, por lo que hay que disfrutarlo. 

Por supuesto quiero que España gane, pero sólo con haber vuelto a llegar a la final me han vuelto a emocionar. Pasará a la historia ese último pase de Silva en el gol contra Italia, el gol de Navas contra Croacia, el cabezazo de Xabi Alonso rompiendo el suelo y el fondo de la portería francesa, las carreras infinitas de Jordi Alba, el gol de Sergio Ramos y sus cojones en la tanda de penalties, la charla entre Cesc y el balón antes de pasar la linea de gol tras besar, como un golfo de discoteca, a la chica poste y, como no, las paradas de San Iker en la tanda de penaltis con Portugal, la que sacó a Pirlo en esa falta envenenada, las manos ante Croacia y las palomitas ante Francia y Portugal.

Si esto acaba como deseo con todo mi alma, el kiosko se llenará de recuerdos, como un ataque D.O.S., y yo los pondré en un lugar especial, donde guardo la replica de La Espada de Miguel Indurain, una foto con Del Bosque, un R25 de ya sabéis quién, los recuerdos de la Eurocopa del 2008 con el gol de Torres saltando sobre toda Alemania - desde Munich a Berlín-, las lágrimas de Rafa Nadal mordiendo uno de tantos Grand Slam, Pau besando el anillo de campeones de la NBA, la Bomba Navarro enchufando un triple con una camiseta roja que reza España de amarillo en esa final que nos dio un Campeonato del Mundo de Basket, Crivillé adelantando a Doohan en un interior tumbando y aprovechando a rasurarse la barba con el asfalto, Dani Pedrosa llorando cuando le daban el título de 125 cc, Jorge Lorenzo llevando la bandera de España tras ganar en Silverstone, el Campeonato del Mundo de 2010 de fútbol con el gol en el minuto 116 de Iniesta de nuestras vidas, las manos imposibles del Santo o el remate de cabeza a lo Goku viniendo desde las estrellas que hizo Conan... digo Pujol... y... tantos y tantos recuerdos que me emocionan de los deportistas españoles. Sería genial que se rompiera mi estantería por poner guardar en ella muchos más.

Hoy sufriré, y lloraré, seguro. Será de alegría o será de tristeza, pero seguro que me toca lavar lágrimas de las tres rayas de colores que me pintaré sobre la cara para ver el partido. Suerte a los que defienden esta noche los colores de la Selección Española.

Saludos Malignos!