Aunque he estado muchas veces en muchos programas de radio, comencé a primeros de septiembre en esto de tener una sección continua en una cadena de radio - concretamente en el programa La Mañana de Cope - y hoy llega a su fin mi participación... por ahora. Esta semana acaba la temporada del programa y todo el mundo se va de vacaciones, así que hoy martes será mi última participación de esta experiencia... que ha sido genial.
Comencé super-tenso dándome cuenta de que desconocía por completo el medio y la preparación de un programa, que una vez visto por dentro tiene tela la historia. Javi Nieves, cabeza más audible de todo, tiene que analizar la actualidad que le proponemos entre todos, escuchar con atención y tomar decisiones en minutos, que luego en directo se convierten en cambios al segundo, cuando una llamada de una entrevista se corta o no aparece a tiempo un corte de actualidad.
Figura 1: María y Javi en el estudio donde se hace el programa |
A su lado Maria engrasa los cambios de marcha entre tema y tema, y está al quite con las entrevistas, los anunciantes, al tiempo que tiene que poner los ojos y las orejas con los compañeros que detrás del cristal llevan el minuto a minuto, para ocuparse de la gestión de las incidencias. Allí vamos llegando los colaboradores, los entrevistados y los compañeros que dan los cortes de actualidad puntualmente, cada uno de nosotros con nuestra guerra distinta.
Al principio yo no me enteraba de la mitad de las cosas. Ni de cuando estábamos en antena o estábamos fuera, ni de cuál era mi horario exacto o de si debía entrar en el estudio antes o después. Se me escapaban los carraspeos y no enviaba a tiempo los guiones de mi sección - lo siento Paloma y Mercedes por tantos retrasos }:P - . Un desastre vamos...
Figura 2: Carlos Gutierrez preparando su comparador y yo en la redacción |
Menos mal que las chicas y chicos del equipo me han ido enseñado algunas cosas y metiéndome en vereda para que me fuera aclimatando. Al final Sara me tenía ya todo listo cuando yo llegaba a la oficina. Además me han permitido volverlos locos con mis cambios de horario, mis giras de conferencias y entradas desde cualquier rincón por teléfono - gracias a la rubia que hace virguerías con la centralita de teléfonos y la morena que me limpiaba el audio - o los cambios de día porque tenía un viaje relámpago. Me han ayudado a hacer convivir mi trabajo con mi actividad en la radio, y han hecho que todos los días que he pasado por allí hayan sido días agradables.
Además he conocido a otros periodistas de otros programas, como el programa de La Tarde de Ramón García o el de El Pirata y su Banda, del que me voy con la pena de no haber conseguido salir todavía en Rock F.M. - a ver si engaño al Pirata para que me lleva en la próxima temporada a algún programa... o muchos que lo mío es el Rock n' Roll y no voy más lejos -.
Figura 3: Con el Pirata en la redacción de la Radio |
Hoy martes a las 11:15 se acaba por ahora todo esto para mí, pero todas las dudas que tenía al principio de si me iba a gustar la experiencia me parecen ahora extrañas a mí, porque me he encontrado mas a gusto que un arbusto. En este artículo os he dejado algunas fotos de las que Pedro - el responsable de medios digitales y de invitarme a café cuando llego corriendo y sin dinero - me ha ido haciendo en este periodo para el Facebook del programa.
Saludos Malignos!
¡Debe ser puro nervio estar en un programa de radio las primeras veces! pero como todo, se aprende, más si hay buena onda entre todos.
ResponderEliminarRecién conozco este blog, que está bárbaro. ¡Saludos!